No fueron los sindicatos los que han llevado la emisión de Telemadrid y Onda Madrid a cartón y silencio respectivamente. Ni tampoco fue la Dirección que no quiso pactar los mínimos. No, fueron los trabajadores que ejercieron su derecho constitucional, secundando mayoritariamente la huelga (más de un 80% de la plantilla que trabajaba).
Y esa libre elección de los trabajadores que dejan de cobrar una media de 150 euros por hacer la huelga es la que ha provocado que no haya emisión. Para eso se hacen las huelgas desde el principio de los tiempos, para parar la fábrica. Y nuestra fábrica se para dejando de emitir la programación habitual. Y esto se consigue porque en nuestra empresa llevamos más de doce años de lucha por defender nuestros derechos y el futuro de nuestra empresa.
La Dirección ha sido condenada por vulnerar el derecho de huelga en tres ocasiones y la Comunidad de Madrid por poner servicios mínimos abusivos. Por eso en esta empresa los trabajadores sí pueden ejercer libremente el derecho a la huelga. Y por eso el día de la Huelga General contra la reforma laboral más regresiva de toda la democracia hemos parado la fábrica. Estamos orgullosos de pertenecer a una plantilla que es ejemplo de lucha y solidaridad para muchas otras empresas públicas. Enhorabuena compañer@s.